84.- 15 MINUTOS DE INFORMES SABÁTICOS (3): PRIMAVERA AGAIN & NORTH-AMERICAN STUPIDITY!Sábado otra vez; la primavera quiere despertar en el hemisferio norte y ya uno empieza a notar la indecisión axilar. Unos pajarracos de aspecto bastante insípido tararean malambos en los arbustos llenos de brotes. Las vecinas sacuden del tetamen los últimos granos invernales y se pasan horas frente a los espejos probando escotes atrevidos, minis muslísticas y peinados á la HiltonParis. El solcito descuajaringa las últimas sombras de Odín; desde ahora empieza la temporada en Balconia.
Tonto de mí, abro el diario. Y en el periódico sobresale una noticia de Deepwater, en el estado de Missouri. Ronald Long intentaba desde hacía horas, junto a un amigo, abrir un agujero en la pared para pasar un cable de televisión satelital. Frustrado -todos sus conatos anteriores habían terminado en fracasos masomeno rotundos- decidió, aconsejado por su colega, disparar un par de tiros con una pistola de pequeño calibre en la pared (aparentemente de madera) para así abrir el hueco deseado. La segunda bala tuvo tanto éxito que atravesó la pared y mató a su mujer Patsy que se encontraba papando moscas del otro lado. El diario no se explaya en aclarar si el tamaño del agujero fué lo suficientemente adecuado para el diámetro del cable.
En la misma página las agencias de noticias dan a conocer las intenciones un poco estrafalarias de un joven de 18 años en Chicago. Decidido a robar una entidad bancaria se apersonó, pistola en mano, en el mostrador de atención al público. Dió a entender su propósito a vivas voces, como corresponde en una acción de tales circunstancias. Los amables empleados explicáronle la imposibilidad de ser partícipes de sus deseos monetarios debido al pequeño detalle que el encargado de la caja fuerte no se encontraba físicamente en esos instantes. El -algo confundido- aspirante a Dillinger decidió emprender la retirada, no sin antes dejar su número telefónico a los boquiabiertos oficinistas con el expreso deseo que lo llamaran cuando el mentado poseedor de llave hiciera su aparición en el consorcio. La policía fué alarmada. Escépticos, los canas llamaron al número bajo la insistencia de los dependientes que aseguraban de la apariencia de subnormalidad del caco. Y héte aquí que el jovenzuelo -tras hablar con los polizontes que ratificaron la presencia del Chef du clé- verdaderamente volvió al lugar del abortado crimen, en donde fué levemente herido al ser apresado, según es citado el Chicago Sun Times.
Que se joda por creerles a los milicos.
Tema del día: If Jesus Drove A Motorhome de Jim White, CD Drill A Hole In That Substrate And Tell Me What You See, 2004
posted by pelayom at 6:30 AM
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82.- EL NARIGÓN DEL APÉNDICE DE ORO
