Saturday, January 26, 2008




75.- ASESINO DEL ZAPALLO. EL ASOMBROSO CASO DEL. (8)
La entrada al Nadie Sabe fue apoteósica: el Pijirito se adentró al tugurio en caída libre, impulsado por la patada en el orto que le había propinado Pepepepé metros antes de la portera en donde descansaba el cadáver de un ovejero alemán, dando de bruces (Willis) contra el entarimado que oficiaba de barra. Los presentes, padres de familia e integrantes de la secta Moon todos ellos, sobresaltáronse, engulliéndose las grappas triples junto a los restos mucales que pendían de sus narinas resfriadas. La violencia era el pan de cada día en esa barriada desesperanzada, esa comarca condenada a ser eterna segundona, perseguida galileamente por los ponciopilatos de los atardeceres parquecentralísticos: Peñarol, esa zona de la desgracia lindante con el bichicomaje más feroz y desdentado que la humanidá tenga memoria, mire. El dueño del tugurio, mal entrazado y con olor a sobacol agudo, levantó la mirada caballuna del diario -resultados turfísticos- que se encontraba leyendo. El Pijirito, sacudiéndose el envoltorio terrenal de las pelusas que se le habían adherido a las prendas, dijo con un hilito de voz resquebrajada por la repentina sed: 'Tenga Ud. a bien, vuestra merced, de servime un adminículo de vidrio repleto de agua mineral sin gas, si es posible'. El esperpéntico se escarbó el único premolar amarillento que le colgaba de la encía inferior, solitario como Adán en el Día de la Madre, y eructó, apenas conteniendo la risa: 'Queré agüita sin gá, mantequita? No te hará mal, ché? El agua es güena pa regá la planta, pero pa tomá te aconsejo el especial de la casa... Vudú Tinto Tre Puñalada...'. 'Gracias, muy amable de su parte, su Excelencia' retorcijóse el Watson arreglándose la busarda que se le había querido escapar de sus contornos camiseriles 'pero preferiría un poco de H2O cristalina de manantial'. Pedro Pablo Piturco Pederast observaba la escena parado en el (Paco) umbral resguardando la distancia con la caterva siniestra del interior. Asombrado de la valentía de su ayudante, rayana en la estupidez, de hacer uso de un lenguaje tan elaborado en una zona famosa por su anafalbetismo; anafalbetismo y bufarronerismo. A lo mejor su amigo y empleado era trolo, reputazo, tragasable, marica, gay, cuchicuchi, calabrio, maricón, sarasa, sodomita, sáfico, y él no lo sabía. Decidió, por las dudas, que si los negros se le tiraban encima él iba a dejar que le hicieran puré el culo. Se lo había buscado. A quien se le ocurre pedir un vaso de agua sin gas en una cripta cochambrosa como aquella? Y, de yapa, utilizando un vocabulario que hubiera hecho emputecer a Garcilazo. El mandril que oficiaba de cantinero se dirigió al baño y allí, a la vista de todos, abrió la canilla del lavamanos -del cual salió un sapo cornudo del Amazonas croando como poseído- y llenó un vaso del líquido verdoso, pestilente, que O.S.E. tenía la gentileza de distribuír por las cañerías del siglo XVIII que componían su ramillete sanitario. 'Acá tiene usté' dijo ante las risotadas de los presentes 'Agua de manantial de primera calidá'. 'Sensacional, le agradezco de corazón, honorable' dijo el ayudante del investigador tragándose de una el viscoso elemento mientras en los rostros de los comensales se dibujaban los primeros gestos de admiración ante tanta insensatez. Un hombre de estómago tan resistente tenía que ser un jinete del apocalipsis. 'Usted me es conocido' dijo el Pijirito dejando el vaso en el mostrador 'No es por casualidad Obdulio Trasante, el ex jugador de Peñarol de los años ochenta?'. 'Esato' dijo el antropoide 'Con el platal que gané en mi vida deportiva abrí el "Nadie Sabe"... y Marito el "Nadie Supo", a la vuelta de la esquina... Nonosasemo competensia... Mi espesialidá son lo vino y la de él lo vermuse...'. 'Marito qué?' se interesó el detective introduciéndose dos pasos en la penumbra de la madriguera. 'Marito...' dijo Obdulio encarando de mala manera al entrometido 'jugaba en mi época enlo manya... el rubito despeinao aquél... junto hubiéramo destobiyado hasta la Madre Teresa - que Dió la tenga lasantísimagloria- si hubiese habido oportunidá de encontrarla de aversaria nel terreno de juego... Marito Saralegui...'
Tema del día: We Get Along, Mostly de David Pajo, CD 1968, 2006

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