Monday, October 23, 2006


7.- SI SUPIERAS QUE EN LASCANO VIVE SANTIAGO.

El tipo insiste. Entiende que uno debe hacerse el tiempo como sea. No importa el método ni la situación del planeta tierra. Quiere que la página web sea como un huevo aigüense, redondito, amarillo polenta y con contenido Irisarri. Y uno, acostumbrado a ser manso buey de la grey y por nombre y santo de la amistad dice mirando el titilante monitor: sí.
Ahora, digo, pienso, de qué carajo escribir, de que cornos hablar en un lugar donde abunda el letrerío como agua salada corsa. Está el O Sea original, obra maestra genial de dos autores buscados por los borrachos de la Legión Extranjera; pero eso, me advierten desde el Carnaby Wil, eso, no se toca, Piola.
Así que entre milanesas pestilentes y partidos de fútbol soporíferos miro los costillares de Tom Mix buscando desesperadamente la respuesta como Susana Crespo en el sudamericano de natación del siglo pasado.
Nada. La Nada y el Ser. Jean Paul Sartre bizco.
Se me ocurre escribir sobre los ídolos olvidados del Kiosk, pero, ¿a quién le importaría esa temática sobre seres realmente anónimos? Supongo que a nadie, ni a Peteco, pero jé jé... ¿y si ese es el kid de la cuestión y hay que empezar a escribir sobre seres absolutamente olvidados y olvidables, reflotar sus pisadas bajo techos de nylon verde entre risas de Cycles Curcc, cejas de lagarto y carcajadas de búfalo mientras los años caen como Guanartemes?
En honor a la realidad, al rescate de la Chichí Coronado, contribuimos los dos, el menor de los Torena y yo, que soy el hijo bastardo del padre del famoso Erich y hermano del coescriba del O SEA...Nuestra familia es una loca comunión de seres irracionales, todos peleados entre sí que se tocan por extremos rarísimos. Pero como eso es tema íntimo y no motivo de estas primeras líneas de seres olvidados y olvidables lo dejamos para cuando los pollos pidan clemencia. Así que retomo, vuelvo, quiero, como Mario Bros creer que estoy volviendo al tema en cuestión refiriendo concretamente a los amigos que hemos ido dejando y cosechando y sembrando y plantando como quien no quiere el tractor.
El loco venía a lo cordero desde Averías por la ruta, por el medio de la ruta. Alto como el cerro Catedral, pelado como una rodilla con los pantalones a media canilla. Todo de blanco como hueso conaprole y hablando solo, como siempre lo hacía. En el pueblo todo el mundo sabía que el loco Santiago hablaba solo, curioso caso donde el pensamiento era conocido per tutti los habitantes del norte del departamento de Rocha. Un caso escopeta donde todo se lanzaba a diestra y siniestra, fuera lo que fuera no importaba el contenido; el loco pensaba en voz alta y no paraba nunca de pensar y de hablar al unísono. Hombre sin secretos aura que dice! Dicen las malas lenguas que alguien muy pero muy parecido a mi padre, tan parecido que era mi padre según parece, le puso para la posteridad el mote rabanito minutero. Ni Dios sabe el porqué de tal puñalada eterna. Lo cierto es que esa tarde bajo 50 grados a la sombra el loco Santiago llevaba recorridos 14 kilómetros y olímpico como Abebe Bikila. Hasta que una culebra se le atravesó en su rumbo a Lascano, ciudad luz, guía de escritores guenoas. Abrió los ojos como Homero Simpson, se le paralizó la charlaecolaliasum, dio tres brincos a lo Javier Sotomayor y salió disparado a mil por hora por -no podía ser de otra forma- el medio de la carretera polvorienta dando saltos mortales abriendo las patas al mejor estilo Nadia Comaneci al grito "si te piso me enloquezco si te piso me enloquezco sitepisomeenloquezcositepisomeenloquezco..." hasta el infinito.
Desde la terraza de la señera casa familiar mi padre lo vio venir meta brinco meta salto meta grito meta gorra en mano y no pudo con la condición. Al pasar el loco en su loca carrera contra nadie, le pegó el grito de siempre, oculto en la altitud y la valentía de su joven vozarrón: "rabanito minutero". Se paró en seco. Se le pasó el susto por arte de Houdini. Enfiló hecho una furia hacia la puerta abierta de la casona. Entró puteando en todos los idiomas y sin parar de patear todo lo que encontró hasta hacerlo volar por los aires..."puta sale el hijo del dotor fonseca me dijo rabanito minutero la puta que lo parió guacho hijo de mil putas si lo agarro lo despedazo que no se esconda dónde mierda estará ese atrevido pobre madre que tuvo a ese degenerado doña alba es una santa y no se merece este mierda dónde estás malnacido no te escondas rabanito minutero a mí nadie me dice así me cago en dios puta sale ..." Siguió largo largo rato, tan largo que mi padre se tuvo que quedar tres días escondido en la buhardilla. La furia del bau fue memorable.
Viajero que diriges tus camambuces al norte profundo y desconocido; ojo con los hombres que son víctimas de la burla de un apodo incomprensible. Son peligrosos. Como culebra electoral.
Tema del día: Raggamuffin Jaia de Negu Gorriak del cd Negu Gorriak 1990.

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