Saturday, September 15, 2007




56.- LOS FUNDADORES (IV).- TE PEGO POR AMOR. VIDA Y PIÑAZO DE PELAYOM DESDENTADOM







'Pelayoms' solía aclarar Pelayom a la boquiabierta audiencia que se agolpaba en las inmediaciones de su casilla para escuchar el aclare de su último acto de rapsodia violenta 'Yo le pegom porque la quierom' haciendo acto seguido la pantomima de un gancho al hígado. Los espectadores contraían sus rostros en un gesto común de dolor. Pelayom era muy convincente en su mímica de como despedazar una desprevenida parte del cuerpo que se encontraba distraída cumpliendo hasta ese momento con una -invisible para el mundo- función vital. 'A la Pelayam le queda muy bien el color violeta de alrededor de los ojos con el platinadom del pelom'. La audiencia asentía anonanada, muerta de miedo. Si el Pelayom hubiera afirmado que un platillom volador había descendido en el Palacio Legislativo y se había raptado al Cuqui Lacalle para llevarlo como asesor a la Primera Planta Depuradora De Whiskies & Anexos De Andrómeda hubieran asentido con la misma convicción. No convenía contradecir al Pelayom bajo ninguna circunstancia, sobre todo encontrándose uno en el radio de acción de su artera mansalva de uppercuts & crosses. El Pelayom cagaba a palos a su novia, La Tilinga, que era, además, onda medio masoca, porque al otro día le mostraba a todo el mundo, escudada en lentes oscuros, lo que 'me hizo TU AMIGO'. Hay que agregar, en defensa del miembro fundador del ilustre Kudomayo Pelayom Desdentadom, que La Tilinga era bien rea. A mitad de camino entre Marilyn Monroe y Miss Piggy de The Muppets dejaba el supuesto con un margen bien grande para interpretaciones equívocas para el ojo del macho cabrío, quesero y carente de ofertas del ramo femenino. El Honorable Consejo Directivo quiere dejar en claro ahora -como lo explicitó en su momento, cuando la policía hizo abrupta presencia en la inmaculada Sede Social- que rechaza toda forma de violencia si proviene ésta de la etnia catalogada como auricarbonera y la acepta sin restricciones si es del bando tricolor. El Pelayom era de Nacional y molía a palos a una turra de Peñarol, así que absuelto por unanimidá. Como en su momento la uniformada autoridá se negó a aceptar nuestra postura decidida democráticamente y fuimos todos presos hemos deducido -sin reparos- que la cana es aurinegra y dictatorial. Volviendo al tema. Hagamos historia. Pelayom Desdentadom vió la luz un día determinado del pasado reciente. Su primera acción fue pegarle una patada en la quijada a la partera. Su segunda acción morderle un dedo a su padre que le hacía cuchicuchi en la barbilla. Su tercera... bueno, con el tiempo, tras el decimoquinto asesinato se calmó. En la escuela era un alumno notable por su imbecibilidad y su irascibilidad. Si lo mirabas torcido luego mirabas torcido a toda la humanidad porque te desencajaba -con certero puñetazo- la columna cervical y tenías que regalar tu merienda para que algún compañerito se enterneciera en empujarte la silla de ruedas. Merienda que no podías, de todas maneras, comer. Tenía un lado bueno pero ahora no me acuerdo. Dejó secuelas de heridos & mutilados por doquier. Cuando, huyendo de la justicia se clandestinizó y abandonó la república, el país entero suspiró. Disfrazado de adorno de parabrisas pasó la frontera hacia el Brasil en un camión -probablemente manejado por Víctor Hugo, el camionero pueta del INVE- que iba en busca de bananas & gonorreas al paraíso del bagayo. Tras descender en Porto Alegre y hacerse un nombre como portero de noche del excelentísimo hotel de -5* Elevado en las inmediaciones de la Rodoviária, funda el Kudo junto a otros compinches del trago & el piñazo camorrero en los fondos de un cine porno.

Los años pasaron y la figura mítica del golpe fácil se pierde en los anales de los lustros venideros. La Imponderable Junta Directiva ya cuasi lloraba la ausencia de tan enhiestos nudillos cuando, en una tardecita de verano en el que el calor hacía estragos vía nasal debido a sobacos sobrerrecauchutados, La Tilinga hizo su platinada aparición luciendo una bombacha rosada -que hacía juego con la minifalda- y unos anteojos oscuros que le daban un aspecto de langosta reventada tras un sismo sexual. Con un gesto no exento de suspenso se los levantó, dejando ver un hermoso arcoiris violáceo agregando, cruzándose de brazos, con la voz tomada por la fingida emoción: 'Viste lo que me hizo TU AMIGO?'. Pelayom había vuelto a casa.

Tema del día: I'm Alive del grupo The Shaky Hands, CD Idem, 2007

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